domingo, 22 de agosto de 2010

Era algo con milanesa…. No me acuerdo. Gracias señor Hemingway, gracias señora Osa.

No hay oso que pueda llevarnos a la tumba. Claro que luchamos con varios mano a mano, e incluso de tanto en tanto, tan solo utilizando los dientes, como única arma. Pero ninguna de aquellas batallas hizo mella en estos cuerpos errantes y aquí estamos de vuelta, para que juntos proyectemos nuestras ingrávidas mentes miles de kilómetros al norte una vez más.

Sobrevolamos los inacabables bosques del Yukón y la Columbia Británica, cruzamos otra línea imaginaria, manchamos los pasaportes con tinta y aterrizamos en Alaska.


En un momento pareció imposible, pero justo cuando ese tirano llamado tiempo, estaba comenzando a hacerse invencible, quitamos un retén, recortamos un resorte y la gran pérdida de aceite que nos paralizaba, desapareció para siempre. Conseguimos poner la nave sobre el asfalto y despegados unos pocos centímetros de los caminos, recorrimos los más de mil kilómetros que separan a Whitehorse de Anchorage, en apenas tres días.

Alaska nos recibió con la misma inmensidad del norte canadiense y rutas muchísimo más transitables que las de su hermano inmediato del sur. Nuestras almas ganaban ahora aire, con la alegría de saber que pronto nos encontraríamos con el mítico Oso de las Pampas y su cuasi gemelo, el franchute Rod.
Apenas pusimos un pié en Anchorage, nuestra buena amiga Jeanne, nos buscó y nos llevó a la casa de CJ y Nancy. Ya con base en la ciudad, con lugar donde dejar todos los bártulos, donde dormir y ducharnos después de cada una de nuestras correrías, estuvimos listos para ir al aeropuerto en busca de nuestros compatriotas.

El primero en caer fue el Oso y por supuesto, fiel a su inquebrantable palabra, del peso total de su equipaje, la gran mayoría era de esencia comestible.
¡Hay galletitas, alfajores, garrapiñadas y leche condensada haaaaay…..! ¡Hay dulce de leche, golosina a mansalva, leche condensada, pepas, galleta, leche condensada haaaaayyy!!!!

Apenas unas horas más tarde, llegaba directo desde Frankfurt, el cabezón con sus buenos vinos parisinos y unos regios quesos franceses.

Por supuesto lo primero que hicimos fue ir al mercado y comprar más comida y chupi. Vaciamos la nave, dejando solo lo necesario para acampar y comer. Todavía no se como, entramos los cuatro todos apretujados y salimos manejando hacia el sur.


Descontrol en la nave, muy poca seriedad e hidratos de carbono para tirar al techo.

La semana que Rod estaría con nosotros, decidimos recorrer la Península de Kenai, con Homer como primer destino.

El raid gastronómico, comenzó con una buena ¡BULENTA! Presto pronta pa´ todo el mundo che. Cuanta alegría para nuestras papilas gustativas, cansadas de extrañar sabores argentos.

La pobre Peque perdió el lugar de copiloto, tuvo que soportar 24 hs de delirios sin pausas y todavía sonríe. ¡Esa es mi Le´ Chien!

Aquellos días, como los muchos que vendrían después en Alaska, tuvieron un factor común: Cielo nublado y lluvioso. Aún así nos las arreglamos para acampar cada noche y acomodar nuestras cuatro almas dentro de la carpita guatemalteca. Los ronquidos marca registrada del Oso de las Pampas, fueron el “armonioso canto de grillos del Paraná” que cada noche nos “ayudaba” a conciliar el sueño. El cadáver (porque no se le puede llamar de otra manera) de Rod, yacía inerte durante horas hasta que lográbamos sacarlo de su trance de sueño y así, cada mañana, comenzábamos un nuevo días de aventuras.


Para abrirnos paso a lo largo de los bosques plagados de abominables bestias mamíferas, decidimos invertir en un aerosol espanta osos. Si, tal como se escucha, existe. Lo que no se, es cómo nos convinieron de que un aerosol tendría el poder suficiente para derribar un oso. Aún me lo pregunto sin hallar respuestas.
Claro que yo era el portador y las instrucciones eran: Si aparece un oso todo el mundo se refugia tras mi escultural cuerpo de físico culturista. Yo, en pleno control de mis acciones, debía conservar la calma y, mientras el animal atacaba en estocada mortal, verificar que el viento no estuviera en contra, quitar el seguro del gatillo del aerosol, esperar a que el oso se acercara a una distancia de 30 pies o menos y entonces rociarlo con esta mezcla mortal de pimientas variadas y sustancias irritantes. El disparo debía ser mortal, ya que en caso de fallar no teníamos un Plan B.
Las caminatas de horas, nos llevaron a través de hermosos bosques nublados. La exigente geografía alaskeña no nos quitó el aliento y durante esas caminatas pergeniamos ambiciosos proyectos televisivos como “A Puro Pino”. Este programa, destinado a cambiar para siempre los paradigmas de la TV moderna, contaba con la animación de la Ardillita Gómez, genialmente interpretada por Rodrigo Laiz.



Foto de alce pastando sin cuernos.
Aquella primera semana, la gran fauna de Alaska, nos fue totalmente esquiva. Aún así, de tanto en tanto algún bicho aparecía y entonces nos gastábamos los rollos completos.

Tras dos días de viaje, llegamos a uno de los extremos de la península. Un pequeño pueblo pesquero llamado Homer. Un largo istmo, se desprende del continente y se introduce en el mar hasta los muelles. A lo largo del mismo, pequeños restaurantes y negocios turísticos le dan color al sitio, que en poco tiempo ya hemos recorrido completamente.
¿Lo mejor de Homer?
Aníbal, Eustaquio, El Rengo, Rolo y Emilio. Cantaron durante cinco horas consecutivas una versión de I will survive, con ritmo de son cubano. Luego disertaron sobre la moralidad del hombre moderno, finalizando la jornada con una crítica sobre “El mundo como voluntad y representación”.

Entonces alguien nos dice que a unas pocas millas, hay un pueblo ruso (uno de los varios que quedaron de la época en que Alaska pertenecía a aquel país). Desde el principio la idea de llegar a este sitio nos cautivó y emprendimos viaje por la accidentada costa que terminó en un camino de piedra, con lomas de exigencia tal, que nos vimos obligados a abandonar al Citro y seguir a pié los últimos cuatro o cinco kilómetros.

Caminamos bajando una empinadísima carretera, el Oso y Rod se desplazaban como ligeras saetas, mientras mi rodilla mala y la ojota descosida de Le´ Chien nos dejaban atrás. Llegamos a la costa y tras caminar otro tanto divisamos las primeras casas, unos simpáticos anuncios nos exhortaban a retornar por donde vinimos. Propiedad privada, no pasar. Estos rusos…… A buscar otro camino.
Después de tanto caminar y con la curiosidad que nos provocaba ver este pueblo ruso, tras dudar un poco, proseguimos por la costa llegando al mismísimo centro del lugar. Creo que la mejor manera de describirlo, es no describirlo en absoluto. En efecto el lugar parecía un pueblo fantasma. Nadie en las calles, un triciclo descansaba sin conductor a lo lejos. Las casas desparramadas por todo el lugar parecían estar vacías y el aire se respiraba con aroma a emboscada. Rara la sensación que sentimos, si bien no había mucho que fotografiar, tímidamente sacamos las cámaras de fotos, esperando el balazo en la nuca. Una rusa con una falda de un brillante rojo oscuro, pasó como alma que lleva el diablo, de ida y vuelta volando con su cuatrimotor por los caminos desiertos.

¿Qué hacemos acá? Nadie tenía una respuesta, nos reímos por lo extraño de la situación y emprendimos el largo regreso cuesta arriba, pidiendo a los dioses que ningún ruso se hubiera chafado el auto.

Destruidos del cansancio llegamos y la nave nos esperaba sin novedades. Poco a poco, nos alejamos por aquellas lomas con nuestro motor que tras dos días de paz (después de Whitehorse), comenzaba a hacer ruidos de muerte nuevamente. Ese maldito golpe del motor, que no me permitía relajarme, sonaba sin pausa haciendo inhabitable la cabina y poniéndome los nervios de punta. Entonces hice un pacto con el Citro. Mientras estuvieran Rod y el Oso, no podía romperse, manejaríamos algo más de 2000 km con ellos, pero no había derecho a la falla. Después, podía hacer lo que quisiese. El pacto fue sellado y cumplido a rajatabla por ambas partes, pero ya me estoy adelantando a los hechos.

Cada “noche” buscábamos un lugar donde armar la carpa, evitando campings y lugares costosos. El sol se ponía cerca de la medianoche y salía antes de las cuatro. En realidad no había noche real, solo una penumbra en las horas más oscuras. En tal caso la oscuridad nunca era suficiente para dar vida a las estrellas y así nos la pasábamos en este verano boreal.

Cada vez que podíamos mojábamos los anzuelos y nuestro espectacular equipo de pesca. Los primeros días cosechamos solo decepciones, sin permisos, nos restringíamos a insignificantes arroyos y ríos de aguas opacas. Llegó a tal punto nuestra desesperación que inventamos un juego llamado “Ruleta de Pescadores” en el cual cada uno elegía un pescador que representaría al jugador. Mirábamos como pescaban estos hombres en busca de algún salmón plateado o salmón rey. Y cuando pescábamos nosotros, lo hacíamos en lugares tan infértiles a los fines de conseguir la cena, que nos vimos obligados a crear otro programa televisivo llamado “Pesca Show”. Entonces el pescador en lugar de guardar silencio e intentar capturar una presa, tenía como responsabilidad máxima, entretener al público. ¿Tendría recompensa la locura en el fin?

Los chicos no podían irse sin probar uno de los clásicos menúes de americaencitro. La sopita “Marruchan”. Estas sopas instantáneas dan por 25 centavos de dólar una comida caliente a quien no sea de paladar demasiado exigente.
Aprovecho la ocasión para mencionar que nuestras fuentes nos han revelado que en Argentina ya se vende este producto, pero que lo que desde Panamá hasta Alaska hemos pagado siempre 1 peso argentino, más o menos, allá se está vendiendo a 3,5 pesos. Estafa total.

Después vuelven a Paris y a Buenos Aires y sacan champagne de la canilla, pero acá hay que laburar viejo.

Una caminata de dos horitas nos llevó hasta un pequeño lago atestado de microtruchas que saltaban enloquecidas en busca de alimento. Desgraciadamente, el lugar estaba plagado de guardaparques y tuvimos que guardar los anzuelos, pero aprovechamos para fundirnos en el verde profundo de estos bosques que a juzgar por el tamaño de sus árboles, deben haber sido castigados por el hacha reiteradamente. Al menos así parece que son las cosas en casi toda Alaska, nosotros imaginábamos pinos enormes y bosques milenarios, en su lugar encontramos árboles más bien achaparrados que no encuentran en el suelo congelado de la tundra, descanso de los filos humanos.
Las truchas seguían saltando y nos obligaron a sacar el equipo.

Parece Pat Morita en Karate Kid, pero es el Oso que ya viene buscando fondo y raspando roca.

Y bueno, una vez más… no es un maestro de Tai Chi, es el oso tirando su célebre fli-flá. Con esta técnica desarrollada por el mismo, no se busca distancia, la idea no es que la cucharita se aleje de la línea costera. En cambio, la exagerada elevación que gana el señuelo, es suficiente como para noquear al animal desgraciado que tenga la mala suerte de nadar cerca de la superficie, cuando el mismo hace contacto con el agua. Presas conseguidas con esta técnica: 0.

Y nosotros, que seguíamos obsesionados con la idea de descargar nuestro aerosol espanta osos, en lugar de bestias salvajes, encontramos en nuestras caminatas a inodoros seres plumíferos. En este caso un ptarmigan, tan manso nos resultó, que ni nos tentó para llevarlo a la parrilla.

Sin osos, truchas o ptarmigans asados para la cena, hubo que recurrir a la sangre italiana. Entonces el Oso se despachó unas pizzas a la parrilla de antología.

Faca intenta partir un tronco con su “herramienta”.

La visita se recuesta sobre las cansadas espaldas del Citro, que se portó como un duque y no nos dejó a pata, mientras cumplíamos con la misión de recorrer Alaska en manada.

En el Russian River o Río Ruso, volvimos a caminar largo trecho hasta encontrar un sitio propicio para la práctica de la pesca deportiva. Esta vez un pequeño muelle y aguas que rápidamente se volvían profundas, prometían resultados.

Le´ Chien siendo la más experimentada y apasionada pescadora del grupo, espera pacientemente.

Las técnicas eran de lo más variadas y siempre poco convencionales. Todos arrojaban sus líneas desenfrenados. Hasta que, finalmente, contra todos los pronósticos...

Con solo mirar como agarra al pescado, puede verse la falta de idoneidad en la materia. Nadie pagaba un peso por este gladiador del reel, pero fue el primero en arrancar a un animal del agua. La historia fue así, el flí-flá no pagó, fue Dolores la que pacientemente sostuvo su anzuelo encarnado con salchicha durante media hora bajo el agua. En un segundo pasó la línea a Faca y poco tiempo después, éste se la dio a su vez al Oso. Cuando picó, la desesperación del rulado compañero fue tal, que sacó al pez volando del agua y lo hizo caer sobre el muelle de un solo tirón. Muchas risas y la cena asegurada.

Ya de regreso, volvimos a desviarnos hacia el sur, esta vez en dirección de Seward. Otro pueblo pesquero al fin de la península pero ubicado en un brazo más hacia el este. Estas tierras montañosas, resultaron ser las más hermosas que encontramos por aquellos días. Por allí acampamos y emprendimos otra caminata de hora y media hasta un lago escondido entre picos llamado como el inofensivo pajarraco terrestre, el ptarmigan.

En aquellas aguas azules, Dolores rompió todas las marcas con tres capturas, siguiéndola en el marcador Rodrigo con dos animales y el Oso con uno. Faca quedó cola ´e perro sin atrapar ni una mojarra.

Le´ Chien y la primera presa.

¡Buop, bop, buop! ¡La ardillita Gómez chicos!

El cabezón no se iría del territorio de Alaska con las manos vacías. Su técnica denominada “el paseíto” consistía en mover la cucharita lentamente delante del pez, una vez que este estaba a la vista. Su alegría es evidente, su locura…. Igual.

Terminada la fiebre de pesca, volvimos a Anchorage tras una semana de camping (debemos reconocer, con una sola ducha) Anclamos en lo de nuestros buenos amigos CJ y Nancy. Nos esperaban con comidita, nos duchamos, dormimos como reyes y de yapa, nos prestaron la camioneta para que llevemos a Rod al aeropuerto. ¡Como nos salvaron! Gente de primera, en nuestro próximo retorno a la capital, nos invitaron a comer afuera y nos llevaron al cine. Así nos olvidamos de nuestra vida salvaje por un momento y recuperamos algunas costumbres de nuestra ex vida en la civilización.

¿Y que decir del cabezón? Para nosotros que estamos andando ya hace tanto, poder ver a un hermano es una alegría difícil de igualar. El hecho de que tanto Rod como el Oso sabiendo que nuestro viaje estaba ya en su última frontera, hayan volado a ser parte de este momento en nuestras vidas, dice muchas cosas. Habla de todo lo que valoran lo que estamos haciendo y de todo lo que nos quieren, por eso apreciamos muchísimo el esfuerzo que ambos hicieron para llegar hasta ALASKA a visitarnos.

Cabeza sos un grosso, que manera de recagarnos de risa, ¡que semana Teté! Cómo te extrañamos! Cómo extrañamos a la Ardillita Gómez! jajajja.
En fin el viaje prosigue, el Oso se quedará una semana más con nosotros y seguiremos recorriendo Alaska otro tanto. Si no había actualizado el blog hasta hoy, es porque no tuvimos ni un segundo para hacerlo. Descubrimos nuestro lugar en Alaska, volamos en helicóptero, navegamos en tres barcos distintos y tuvimos que volver a abrir el motor de la nave. Después de eso manejamos como locos hacia el sur saliendo de la gran península, atravesando todo Canadá y Estado Unidos en quince días. Hoy nos encontramos ya de regreso en la casa del Tío Luis en San Diego, a veinte minutos de la frontera con México. Estamos haciendo lo imposible por ver si podemos embarcar el auto a Argentina y volar, pero la cosa no es tan sencilla. Siempre fue igual en este viaje que, desde el principio, planteamos como algo distinto y lleno de desafíos.

No sabemos cuando ni como vamos a volver a casa, pero nos morimos de ganas de llegar y estamos poniendo toda nuestra energía en esto. Por eso manejamos 6500 km a razón de 400 km o más por día con la nave que se ha recontraportado después del último arreglo.

A todos los amigos, los hermanos, los compañeros de correrías, les queremos agradecer infinitamente la inmensa cantidad de mails y saludos que nos han dejado en la página. Semejante fue la avalancha de felicitaciones tras nuestro arribo a Alaska, que no entramos en nuestros pechos de la alegría. Es hermoso saber cuantos amigos tenemos desparramados por el mundo, a algunos los hemos podido abrazar y ver, a muchos otros todavía no. Como ya les dije nos han agrandado el corazón, el alma y la cabeza casi forzándolos a estallar en una inmensa supernova de alegría.

Sin sus palabras, sin su empuje, no había spray antiosos. Sépanlo.

Desde San Diego y con la vista clavada en el sur, los despedimos con unas cuantas patadas ninjas, un pisotón de columna vertebral y una doble Nelson invertida con fli-flá.

¡Tante grazie conejillos!
¡Arrivederci e buonafortuna!

















La verdadera razón de nuestra ausencia.
Ni boca, ni ojos, ni nada que le asemeja a una criatura conocida. Más bien diré que nos fagocitó atrapándonos en una membrana translúcida. Tampoco vino de lugar alguno, pero con certeza podemos decir que nos sumergió en el más profundo de los océanos. Y que tan profundo se hundió, que nos privó de la luz por completo.
Dentro de aquel ser habremos pasado al menos dos años terrestres, y si bien determinar el tiempo transcurrido con exactitud nos resulta imposible, el largo de mis barbas al salir, fueron el mejor y nuestro único reloj. Dentro, en aquel espacio húmedo y de inaccesible oscuridad, no había a donde ir, ni que hacer.
Día y noche, tarde de té y amanecer dorado, todo vuelto nada, todo vuelto ciega y vana espera.
Casi abandonados a la muerte, tras buscar una salida durante días enteros, jamás hubiésemos recobrado la libertad de no haber sido por esa pálida luz, que ahora deduzco, probablemente haya pertenecido a un pez de la llanura abisal. Como bien sabrán ustedes, me refiero a la bioluminiscencia que muchos de los seres de las profundidades producen en simbiosis con ciertos microorganismos que tienen la capacidad de generar luz. Aquella fosforescencia incierta e inesperada, iluminó por un segundo un ejército de medusas, cuyos tentáculos ponzoñosos utilizamos sistemáticamente para provocar la úlcera de aquel estómago infinito. Con los primeros reflejos de peristaltismo inverso, ganamos la libertad.
Debimos nadar en la oscuridad todavía cien años hasta llegar a la superficie, obteniendo el oxígeno de un millón de algas que arrastramos atadas a nuestras cinturas. Nos alimentamos de toda clase de extraños peces, moluscos y cefalópodos aprendiendo incluso a abrir almejas con el pensamiento.
Nuestros cuerpos acostumbrados a la vida submarina ya se habían cubierto de escamas y fue en extremo difícil readaptarnos a la gravedad de la tierra. Aún con todo esto al recobrar la libertad, lo primero que hicimos fue escribir estas líneas para que supieran de nosotros.
Ahora estamos bien, gracias y chau.

20 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Ya vienen en bajada o pasaron de largo?

    Como fuera, si todavía están por volver los espero, y si ya pasaron, otra vez será!!

    Felicitaciones por lograr semejante meta y por compartir su travesía con todos nosotros, mentes y cuerpecillos menos aventureros!! :)

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  3. waw!!! los amo!!!!!!!!!!!!!!!amo! extrano! estan divinos todos!

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  4. Buop, buop, buop! "como muchas nueces" Que ardillita esta ardillita gomez!

    Bueno, nada para agregar sobre lo que ya esta dicho, una semana que no llego temprano y termino antes de lo deseado. Nos hemos cagado de risa.

    Para los que leen este blog, quedense tranquilos, porque estos dos descocados andan mejor y mas felices que todos nosotros juntos

    Che! es muy probable que con la enana estemos sacando los pasajes para la Argentina (para el 9/12) acordate que en el pueblo ruso me prometieron estar por el sur para festejar las navidades juntos.

    Abrazos y besos para uds cabezones de bachin

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  5. Anónimo23.8.10

    QUe alegría! Me encanta! me encanta! me encanta! Totalmente como la propaganda de la hamburgesa imperialista ME ENCANTA!!!!!!!!!!!!!!!!! leerlos me habre el alma! Saludos desde San Juan - Argentina. Cecilia.

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  6. Anónimo23.8.10

    ja ja ja perdón, de la emoción mi alma de habre!! y no se abre!!!!!!!!!! Más saludos desde San Juan - Argentina. Cecilia

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  7. Bien por ustedes, ya sabemos que estan circulando en este planeta y es en sentido estricto, pues no muchos se atreven a cruzar america en un citro. . . con ganas y siempre TOY STORY al infinito y más allá . . .
    Saludos desde Guate Buena si no pasan por tierra, por lo menos sabremos que en algun momento cruzaron en avíon y la navy en boat . . .

    Adelante muchachos ya demostraron que con voluntad TODO SE PUEDE

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  8. Hay una nena más completa que Lolita?... mmm... Cuando de pescar se trata... ya vieron. Cuando hay que cocinar... voilá!... si se trata de bancar a muerrrrrte... hasta aprende de mecánica,o no?... y si para cuando vuelva, la esperan como profesora de Catequesis para Jóvenes... ella estará... siempre. Como ya lo ha hecho... como sólo ella lo hace. De hecho, me ha parado en la calle una de sus "alumnas" para pedirme que le acerque su cariñoso recuerdo, y le haga saber que ella le encendió una lucesita dentro del corazón.
    Es que no es fácil... y sin embargo, todo lo hace fácil.
    Como madre, no puedo pedir más: Es una verdadera mujer... con la delicadeza y la fortaleza que ello implica.

    Iris

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  9. Hola!!!si que emocion estar los 4 juntos, realmente es imposible contarlo con palabras, bueno un ALEGRON VERLOS Y SABER QUE PRONTO ESTAREMOS TODOS JUNTOS NUEVAMENTE EN LA ARGENTINA... Les mandamos muchos besos y el paisaje es fantastico....los queremos un montonnnnnnnn y estan super FELICESSSSSSSSS!!!!!!!

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  10. SUPREMA ALASKA!

    Ahora sí, bueníiiisimo! Qué manera de reírnos allá y ahora de nuevo cuando los veo el blog! Digan lo que digan, el Flí-Flá hizo su trabajo al ahuyentar a los peces del centro de la laguna y arrimarlos a la costa. No quería develar ese secreto para avivar a los giles, pero no se extrañen ahora si ven a más de uno probando la nueva técnica por todos lados.

    Gracias Cabeza por la magia, espectacular que vengas en diciembre. Ya tenemos lista entonces la gira de verano de "A Puro Pino" y nos esperan... bueno, en Pinamar, obviamente! Traete el traje de la ardillita Gómez y largamos!

    Y para el matrimonio Laiz y su hijo descapotable, palabras infinitas de agradecimiento por hacer que valga la pena toda la movida por estar ahí. Muchos no saben lo que fue la telenovela y el suspenso de la última semana previa, cuando llegaron a último momento y nos manteníamos en contacto gracias a la coordinación de Noelia. Y después de tanto esfuerzo... lo que faltaba, bancarse los ronquidos y el Beaufort! Si vienen para acá, armamos la carpa en el jardín de casa y les prometo más ronquidos y Maruchan si se ponen nostálgicos como yo.

    Gracias por todo!!! Les deseo lo mejor para el regreso, y ya saben que la mejor decisión que pueden tomar sobre el camino a seguir siempre está en ustedes (y se darán cuenta que no estoy hablando solamente de la vuelta).

    Abrazos!


    El oso nostalgioso & cía.

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  11. COLORADO25.8.10

    eaea pepe! como me hubiera gustado acompañarlos por unos dìas... tendria que haber aprovechado cuando estaban por necochea! abrazos colorados

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  12. Oswal (yo no mate a Kennedy)25.8.10

    Lamento comunicarle a todos los seguidores que esos 2 años y medio fuimos engañados por estas viles personas.
    No se trata mas que de otra de las tantas cosnpiraciones de las que somos victimas.
    Asi como se permitio la destrucción de las torres gemelas, como se sabia del ataque a Pear Harbor, como los yankees tienen ovnis y alfes escondidos, como los rockefeller y rothchilds gobiernan el mundo, como estan arreglados todos los partidos de futbol, con sutiles trucos fotograficos (observese la foto de Loli con el pescado, esa sonrisa es robada a loa mismisa Mona Lisa!) y una prosa trabajada estos sujetos (que en realidad esn encerrados en el placard de una casa de campo) piensan obtener importantes ganancias lucrando con este viaje imaginario. Por favor! Cuantos kms dicen que hizo ese citroen????????

    No se dejen engañar abran los ojos! La verdad esta ahi afuera! I want to believe

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  13. Nos han hecho volar, navegar, caminar, reir, llorar; hinchar el alma, el corazon, querer; creer, sentir, saber que todo es posible si al lugar que quieras ir llevas contigo a quien quieres y a los otros en el corazon.
    Son de otro planeta, son unos grandes.
    Siempre que los leo se me infla tanto el alma que me estruja unas lagrimas a los ojos.

    Checho&Pato
    Suramerica.saboresypaisajes@gmail.com

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  14. Anónimo26.8.10

    Loli! Facu! Qué bueno tener noticias de Ustedes! Nos alegra enormemente que hayan tenido visita de la familia y que les hayan llevado regalitos de comida argentina. Me imagino que ese dulce de leche debe haberles sabido a gloria...
    Siento mucho mi comentario sobre los osos, pero les aseguro que Lewis estaba ya a punto de llamar al a policía de carreteras de Alaska, y con el citro (un carro poco inusual) hubiese sido muy fácil ubicarlos. Afortunadamente, y como dices Facu, no hay oso, ni criatura, que pueda detenerlos.
    Si se deciden a regresar por tierra, y si llegan a pasar por Cali, Colombia, pues aquí los espera su cuartico y el servicio de hotel de cinco estrellas.

    Un abrazo, por qué no, de OSO!

    Como siempre recordándolos,

    Patty y Lewis Sager

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  15. Anónimo27.8.10

    Hola Chicos,

    Leerlos me alegra el alma de saber que estan bien y en camino. NO LE DEN IMPORTANCIA A LAS PELOTUDECES QUE PUEDAN DECIR LOS IGNORANTES DE ALMA. Se que llegaron porque mi tio vive en DF Mexico, y los vio pasar.
    Asoy testigo de eso,
    Esperamos conocerlos pronto en Argentina.

    Saludos Gigantes..!!

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  16. Amigos citronences, esperabamos esta entrada!! Nos preguntabamos que apsaba que nohabia actualizacion!!!! que hermoso todo y que lindas las visitas siempre les dan a uno fuerzas multiples para seguir, como un bonus doble super mario bross!!! Aca anda la chancha dando vultas por el hermoso ecuador que nos esta dejando cada vez sn menos palabras !!!contentos, contentos mal!!! Viviendola !!! felices, Por ahora no cruzamos anacondas solo mangueras de filtro feroces que se rompen de la camio! Les mandamos buena vibra de toda la que podamos a traves del espacio!!! ABRAZOSSSS ENORMISIMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

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  17. Anónimo9.9.10

    Un saludo desde Corcega!!!( nos hemos encontrado en San Diego,California.)
    Buena continuacion,les deseo lo mejor!

    Marie.A

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  18. Hola chicos,
    Encontré este blog por medio de "conun12poramerica" y la verdad que me encantó.
    Leí los tres años de vuestro viaje en solo 2 días, parte en el trabajo, parte en casa, en fin, enganchadisimo.
    No se cuelguen y sigan escribiendo que necesito maaaas, maaaaas.
    Hace 3 años un amigo italiano me dijo...Santi, y si hacemos un viaje por América en un Citroen? (y que sea amarillo) No he perdido ni las ganas ni la esperanza que algún día haré algo similar.
    En fin, vamos chicos que ya no queda nada para estar en casa. Si deciden seguir viajando y el destino es Europa, cuenten al menos con unos mates en Barcelona..jeje!! y si tengo casa, pues casa. Un abrazo enorme a los dos.
    Santi

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  19. Anónimo22.9.10

    Chicos, felices 1001 días de viaje! Esperamos nuevo post. Saludos desde San Juan. Cecilia.

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  20. Te invitamos a uno de nuestros Hoteles en avenida universidad a disfrutar de una experiencia única en el Distrito Federal

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